Un seminario internacional se celebró del 7 al 10 de octubre de 2021 en Valongo, Distrito de Oporto. Se celebró de forma mixta, con una importante asistencia presencial y algunos ponentes y participantes a distancia, a través de Internet. Promovido y organizado por LOC/MTC - Liga Obrera Católica/Movimiento de Trabajadores Cristianos, con el apoyo financiero del EZA - Centro Europeo para los Asuntos de los Trabajadores y de la UE - Unión Europea, contó con la participación de representantes de organizaciones de trabajadores de Portugal, Alemania, España, Eslovaquia y Francia, sobre el tema: "El impacto de la pandemia del coronavirus en el empleo, las familias, la sociedad y la protección social".
En la mesa de la sesión inaugural estuvieron: D. Manuel Linda, Obispo de Oporto, que presidió la sesión; Dña. Ana María Rodrigues, Vicealcaldesa de Valongo; D. Américo Monteiro, Coordinador Nacional de LOC/MTC y Dña. Maria Reina de la Administración del EZA. Agradecieron a Valongo su elección y elogiaron el tema en debate. De las intervenciones, destacamos la preocupación de que todavía no es posible predecir con exactitud las verdaderas consecuencias de esta pandemia, y que la pandemia no fue vivida ni sufrida por todos de la misma forma, pero que todos tuvieron muchos cambios en su vida cotidiana, lo que trajo muchos dramas y sufrimientos personales y a la sociedad. Fue y es más duro para los más vulnerables. El aumento de la pobreza de los más desfavorecidos, a través de la pérdida del empleo, la pérdida de ingresos, el paro, la violencia doméstica, la angustia, la inseguridad, el empeoramiento de la salud mental, fue y es muy impresionante. El Obispo D. Manuel Linda dijo que "los jóvenes fueron y son el grupo que más sufre y asistimos a un drama de muchos jóvenes que tienen dificultades para encontrar trabajo y lo que encuentran es en condiciones indignas, con largas jornadas y bajos salarios. La sociedad supo encontrar algunas respuestas en un tiempo récord, y si no lo hubiera hecho las consecuencias habrían sido mucho más desastrosas y con mucho más sufrimiento". También destacó que "sois un Movimiento Obrero Cristiano, no perdáis esa identidad”.
En las demás sesiones, intervinieron D. Nuno Nunes, profesor universitario e investigador del ISCTE-CIES-IUL (Instituto Universitario de Lisboa); Dña. Diana Salgado, participante en el pueblo "CO2 de las desigualdades" de la economía de Francisco; D. Américo Mendes, profesor de la Universidad Católica de Oporto - UCP; Dña. María Clara Murteira, profesora de la FEUC - Facultad de Economía de la Universidad de Coimbra y D. José Luís Molina García, de la HOAC - (Hermandad Obrera de Acción Católica) de España
En la primera sesión, moderada por D. Rui Lavoura, tesorero nacional de LOC/MTC, y sobre el "Impacto en el empleo, las relaciones y las formas de trabajo. Sobre el diálogo social y sus implicaciones en Portugal y en Europa. Su significado en la vida de los trabajadores y la familia", D. Nuno Nunes, desarrolló una amplia reflexión sobre el trabajo en la actualidad y los retos a los que se enfrentan los distintos actores sociales.
La agenda del trabajo decente debe incluir el debate sobre el futuro del trabajo, porque este debate está siendo subvertido por una lógica en la que el determinismo tecnológico y las grandes premisas de la orientación económica y política pueden subordinar el bienestar de los trabajadores.
Es necesario consolidar agendas políticas que den centralidad al trabajo, en una lucha constante. Permanentemente nos distraen con agendas que ignoran el trabajo, y esto no puede suceder, porque debemos mantener la centralidad del trabajo y que es lo fundamental para el desarrollo de las sociedades. Por lo tanto, el diálogo social, la idea de transformación basada en el trabajo tiene que estar presente en estos lugares donde las agendas compiten entre sí.
En la segunda sesión, moderada por Dña. Olinda Marques, presidenta del MTCE - Movimiento de Trabajadores Cristianos de Europa y dirigente de LOC/MTC de la diócesis de Coimbra, D. Américo Mendes y Dña. Diana Salgado desarrollaron el tema "Consecuencias económicas y sociales en el futuro del trabajo, su valorización y la justa distribución de la riqueza". La pandemia ha acentuado las transformaciones que ya se estaban produciendo. La primera, una tendencia que ya está en marcha desde hace tiempo, es la reorganización de los procesos de producción y de las actividades económicas en términos de cadenas de producción y distribución a escala mundial. Cada pieza del producto final suele fabricarse en un lugar diferente del mundo, según las mejores condiciones económicas. Esto se hace posible como resultado de la 3ª y 4ª revoluciones industriales que combinan la tecnología, para, entre otras cosas, fabricar objetos y fábricas inteligentes, sustituyendo las tareas con presencia humana por inteligencia artificial, vinculando todo esto, a lo que llamamos el internet de las cosas. Esto tiene dos caras, producimos mucho más que antes y con diversidad de bienes y servicios, pero si es más barato fabricar una pieza en otra parte del mundo, "cerramos aquí y nos trasladamos a otro lugar, dejando atrás el paro y la basura medioambiental".
Hay una tendencia a la individualización del trabajo, con muchas personas en teletrabajo. Pero hay otra transformación que no es el teletrabajo y que se llama "nube humana". Es una empresa que tiene unas tareas que realizar y las pone en Internet para que alguien en otro lugar del mundo las realice, en un proceso de contractualización por trabajo. No se trata de una relación laboral asalariada con legislación laboral. También se compartió la experiencia de Dña. Diana Salgado, que forma parte de un proyecto propuesto por el Papa Francisco, basado en la Encíclica Laudato Si', sobre una nueva forma de economía más inclusiva, que implique a cada persona, en su lugar de residencia, marcando la diferencia, poniendo la fraternidad en el centro.
La tercera sesión, moderada por D. José Augusto Paixão - Líder de la LOC/MTC de la Diócesis de Santarém, fue una mesa redonda sobre: "Compartir la situación de cada país, ganancias o pérdidas de los trabajadores. Cómo se afrontan las medidas de recuperación". D. José Ricardo - líder de Base Fut - Frente Unitaria de Trabajadores, Portugal; D. Filip Cerny líder de NKOS - Nezávislé kresťanské Odbory Slovenska, Eslovaquia; D. Johannes y D. Wilfried Wienen, líderes de KAB Aachenn, Alemania; y D. Paco Alamós, líder de HOAC - Hermandad Obrera de Acción Católica, España. Compartieron sus experiencias en sus países y las respuestas que encontraron, o no, para recuperarse y afrontar los retos de la pandemia. En todos los casos, de las experiencias compartidas, se observó que la vida de los más vulnerables ha empeorado y que la pandemia se ha sumado a los problemas que ya existían y ha puesto de manifiesto nuestra vulnerabilidad. En el caso de los trabajadores precarios, principalmente en Servicios y Turismo, donde fueron los primeros en perder su empleo, sus ingresos y en tener peores condiciones laborales. Las desigualdades se hicieron mucho más visibles en el acceso a las tecnologías digitales, del lado de los más pobres y muchos quedaron excluidos de esta forma de comunicación. Tenemos que hablar menos de los pobres y hablar más con los pobres, escuchar su angustia, preguntar qué se puede hacer, aunque no se encuentren respuestas inmediatas, tendremos la fuerza para buscar respuestas y no rendirnos. Tenemos que inquietar y replicar la ola de solidaridad o, de lo contrario, la pérdida de derechos sociales continuará. Somos responsables de todos, por lo que es necesaria la globalización de la esperanza que nace y crece en las personas.
En la cuarta sesión, moderada por D. Américo Monteiro, Dña. María Clara Murteira desarrolló el tema: "Altos niveles de precariedad, desigualdades e inseguridad en el trabajo y en los ingresos, cuestiones puestas de manifiesto por la pandemia. Medidas necesarias a nivel social, económico y político en Europa, para promover el bienestar de todos, especialmente de los más pobres". Comenzó su discurso con la frase "Las vulnerabilidades que caracterizan el mundo del trabajo hoy en día son de naturaleza sistémica. Su resolución requiere cambios sistémicos, que implican la transformación de las estructuras económicas y sociales. Las políticas neoliberales de la Unión Europea han hecho más vulnerable el mundo del trabajo. La política monetaria se ha centrado en el control de la inflación y la estabilidad del euro. Si sólo quedan estrategias por el lado de la oferta y son estrategias que obedecen a la primacía de la competitividad, las empresas compiten en precio, y esto representa una presión permanente sobre los costes salariales. Si sólo hay estrategias del lado de la oferta para relanzar el empleo y el crecimiento, los derechos de los trabajadores y los derechos sociales se ven presionados y aparecen nuevas y peores legislaciones. Lo que prima es la competitividad, y los derechos laborales y sociales se subordinan al imperativo de la competencia, se convierten en medios para promover la eficiencia del mercado de trabajo y para promover la competitividad exterior de las economías.
La quinta sesión fue moderada por Dña. María das Neves Jesus, líder de la LOC/MTC en la Diócesis de Oporto, y D. José Luís Molina García, que desarrolló el tema: ¿Cómo poner a la persona en el centro, en el modelo de organización del trabajo, de la sociedad y de la economía, que atiende a la dignidad humana, aprovechando la clara lección de esta pandemia?
Desarrolló su reflexión aclarando que, dentro del sistema económico en el que vivimos, existe la tentación de buscar soluciones dentro del propio sistema, pero que compartía con nosotros otra lógica, la de una perspectiva cristiana. La economía, que debe ser un instrumento al servicio de las necesidades humanas, se ha colocado en el centro y se ha convertido en un fin en sí misma y descarta a las personas.
Vivimos en una época de cambio, pero un cambio de época, no son las cosas del mundo las que están cambiando, es el mundo el que está cambiando.
Pasar de la lógica de la rentabilidad a la lógica de la gratuidad. Repensar la economía, creer que la economía puede ser de otra forma, no estar condenados al egoísmo, el crecimiento económico como dogma indiscutible no es la respuesta. No responde a las necesidades humanas, sino sólo al afán de lucro. Necesitamos una nueva mentalidad.
Concluimos el trabajo con una visita temática al Centro de Recursos Distrital de Apoyo para pacientes con covid-19, para ver las dificultades encontradas en la acogida y tratamiento de los pacientes y las secuelas resultantes en la salud de los pacientes que sobrevivieron. Una conversación con Sor Sónia Tereso, que ayudó a comprender las dificultades vividas en la institución que puso a disposición del Ministerio de Sanidad este espacio de apoyo y los retos y transformaciones que sufrió la institución durante el periodo más agudo de la pandemia.