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El trabajo, la ciudadanía y la representación: poner a prueba aspectos del diálogo social en relación con la inmigración en tiempos de la COVID-19

El 17 de junio de 2021 tuvo lugar un seminario en Cagliari / Italia sobre el tema "El trabajo, la ciudadanía y la representación: poner a prueba aspectos del diálogo social en relación con la inmigración en tiempos de la COVID-19". El seminario fue organizado por FLC (Fondazione Luigi Clerici) en colaboración con IPCM (Plataforma Internacional de Colaboración y Migración) y apoyado por EZA y la Unión Europea.

La sesión del seminario fue inaugurada por Paolo Cesana (Director de la Fondazione Luigi Clerici). En su intervención, explicó por qué los organizadores habían elegido ese tema para la conferencia, así como las expectativas y objetivos marcados. Los acontecimientos propuestos en la agenda se caracterizan por su actualidad y el interés con el que se siguen. Esto también se aplica a los países representados en este seminario. Paolo Cesana dio la bienvenida especialmente a los participantes que hicieron su contribución por la mañana, así como a los participantes de otros países europeos.

El trabajo, la ciudadanía, y la defensa a través de las organizaciones de trabajadores desempeñan un papel crucial en el proceso de integración de los inmigrantes. El objetivo del seminario era analizar la importancia de esos conceptos para el proceso de investigar los (nuevos) retos para las organizaciones de trabajadores en este contexto debido a los efectos de la pandemia por coronavirus. El impacto de la pandemia del coronavirus en los mercados laborales europeos ha azotado a grupos de trabajadores especialmente vulnerables, incluyendo a los inmigrantes. El seminario primero analizó la situación de esos inmigrantes que ya estaban integrados en el mercado laboral antes de la pandemia por coronavirus, especialmente en los sectores en la que la proporción de trabajadores inmigrantes es alta y que ya reciben especial atención: por un lado, el turismo y los hoteles – y la restauración, en la que los trabajadores sufren de precariedad y el desempleo: y, por otro lado, las condiciones laborales en los sectores importantes de la sanidad y asistencia. En este contexto, en un segundo peldaño, se debatieron las dificultades de los trabajadores inmigrantes que aún tienen (o tienen que reintegrarse) en el mercado laboral. El seminario subrayó cómo la pandemia del coronavirus ha dificultado el acceso a una mayor formación y empleo sostenible - especialmente para los grupos más desfavorecidos en el mercado laboral. El seminario desarrolló las estrategias para los organizadores de trabajadores que les permitió apoyar a los trabajadores inmigrantes en el proceso de integración durante la pandemia del coronavirus y representar sus intereses en el diálogo social. Las relaciones con socios europeos como Lituania, Bulgaria, Eslovenia, España, Italia, Bélgica y Rumanía permitieron unificar acciones para promocionar la integración de los inmigrantes con la solidaridad como base. Los testimonios de los socios y las instituciones que asistieron a este importante evento también aclaró que otro resultado del impacto de la pandemia por coronavirus en Europa es que las organizaciones de trabajadores tienen que representar los intereses de los trabajadores y las situaciones difíciles. Mostraron a las organizaciones de trabajadores los caminos y estrategias para utilizar el diálogo social en la situación actual para representar los intereses de los trabajadores inmigrantes, que son los más directamente afectados por el impacto del coronavirus en el mercado laboral. La participación de las organizaciones de sindicatos en este importante punto en el tema de la inmigración supuso una aportación fundamental. Caterina Coco, representante de la Confederazione Generale Italiana del Lavoro (CGIL) en la región de Cerdeña, donde tuvo lugar el seminario, destacó la importancia del tema de la inmigración y la necesidad de un trabajo constante y serio tanto a nivel regional como nacional. La CGIL está muy comprometida con el desarrollo e implantación de políticas de inmigración inclusivas para que la población que necesita encontrar su sitio puedan poner el pie en otro país y ser y sentirse bienvenido y acogido y, por lo tanto, construir su propia vida. El papel que desempeña Europa en todo esto es fundamental. El punto de partida es el proyecto europeo, que, por supuesto debe llevarse a cabo conjuntamente. Cuando tratamos el tema de la inmigración, significa que debe haber una capacidad de inclusión en los Estados Miembros para que se pueda gestionar la inmigración. Los movimientos migratorios simplemente no cesarán; al contrario, aumentarán. Los pueblos se encontrarán, y se reunirán. Incluso durante la dramática pandemia del Covid-19, las organizaciones de trabajadores han plantado cara al problema. Los acercó aún más. Tras ellos, hay una experiencia que debe ayudar a superar las vallas fronterizas entre estados y aprender a ver al otro como no como un problema, sino como una oportunidad, sabiendo que beneficia a todos y refuerza a todos. Esa es la política de que la Unión Europea debe perseguir. Sin embargo, este tema no sólo abarca a toda Europa. En la zona del Mediterráneo, el drama y los problemas están muy claros. El curso político que se está llevando a cabo ahora para definir los objetivos para la Agenda del 2030, que pretenden abordar los temas del hambre, pobreza y trabajo en el mundo, requieren un alto grado de sinergia. Sin embargo, la pandemia ha aumentado las desigualdades y existe un fenómeno que agravará aún más la situación en los países africanos, por lo que cabe esperar más movimientos migratorios. De momento, se trata de encontrar la solución correcta.

No es suficiente decir: “Estamos a favor de los inmigrantes”. Debe haber un derecho a inmigrar y un derecho a ser admitido y debe aplicarse. Es en esta dirección en la que el CGIL se está posicionando como unión, trabajando desde dentro, reforzando la cultura desde dentro y desarrollando acciones para implicar a los demás y hacer que se escuche su voz y que cada uno haga el trabajo que le corresponda, es decir, asegurar que los derechos y protecciones se consagren contractualmente.

En el contexto de todos los informes, el director de la Fondazione Clerici aborda el tema de las competencias y el Mercado laboral, que es una cuestión que preocupa particularmente. El tema de la inmigración es un proceso tan imparable como el tema de la mezcla de la población. Por más que se mire a los demás con sospecha, una competencia en la que hay que trabajar con carácter de urgencia es el conocimiento del otro, una apertura mundial a las oportunidades y competencias, también en educación, que la mano de obra inmigrante es capaz de soportar.