Del 6 al 8 de agosto de 2020, se celebró en Vilna / Lituania la conferencia internacional titulada «El desarrollo de capacidades de las organizaciones de trabajadores: la imagen futura de los trabajadores frente a las condiciones generales cambiantes». La conferencia fue organizada por el sindicato lituano «Solidarumas» junto con el Centro Europeo para los Asuntos de los Trabajadores (EZA), con la ayuda financiera de la Unión Europea. A pesar de las restricciones provocadas por la pandemia mundial de COVID-19, a la conferencia asistieron físicamente participantes de Polonia, Letonia y Hungría. El discurso de bienvenida fue pronunciado por Kristina Krupavičienė, presidenta del sindicato lituano «Solidarumas».
Durante la sesión plenaria, la primera presentación sobre «Principios de acción social en la sociedad y la empresa» fue realizada por la Dra. Irena Eglė Laumenskaitė, investigadora asociada de la Universidad de Vilna. Lo que más impresionó a los participantes en la conferencia fue la opinión de la ponente de que las autoridades lituanas son las que más temen a los emigrantes que regresan, quienes, tras haber adquirido la experiencia habitual en los países occidentales, ya no están dispuestos a soportar las violaciones de sus derechos, ni las de los sindicatos a los que se ha conferido el poder de proteger a los trabajadores de las arbitrariedades y los abusos de los empresarios. Irena Segalovičienė, asesora de Asuntos Sociales del presidente de la República de Lituania, aseguró a los participantes en la conferencia que el presidente de la República de Lituania, S.E. Gitanas Nausėda, entiende el papel del diálogo social y de los sindicatos en la vida del Estado y su contribución en el desarrollo del estado del bienestar y en las decisiones relevantes para todos los ciudadanos del país.
El presidente y sus asesores ya han mantenido varias reuniones formales e informales con los representantes sindicales. El presidente ha presentado al Seimas varias enmiendas a la ley teniendo en cuenta la opinión de los sindicatos.
Irena Segalovičienė aseguró que la fructífera cooperación entre la Oficina del Presidente y los sindicatos continuará y se reforzará.
Jonas Rasimas, responsable de gobernanza económica de la Representación de Lituania en la Comisión Europea, hizo una presentación sobre «La representación de los trabajadores en un mundo laboral cambiante», en la que expuso la opinión de la Comisión Europea sobre la situación en Lituania.
Subrayó que la Comisión Europea no ha dejado de destacar la mala situación del diálogo social en Lituania, que provoca y profundiza otros problemas sociales. Por lo tanto, a pesar de los buenos indicadores de crecimiento económico, la exclusión social está aumentando y casi no hay señales de que la tasa de pobreza esté bajando. Además, los profesores, médicos y otros trabajadores del sector público reciben una remuneración insuficiente, y los jubilados perciben pensiones demasiado bajas en relación con el nivel de desarrollo.
Jonas Rasimas reveló que la Comisión Europea tiene previsto adoptar un plan para rescatar las economías de los estados miembro de la Unión Europea afectados por la pandemia mediante la concesión de elevados préstamos con intereses bajos o nulos. A principios del nuevo año, estos fondos deberían llegar también a Lituania. Por lo tanto, es de vital importancia el compromiso de los sindicatos para garantizar una distribución transparente y justa de los fondos. Precisó que estos fondos no están relacionados con el plan denominado Plan ADN de la economía del futuro adoptado por el Gobierno.
En la mañana del segundo día de la conferencia se debatieron los temas de fortalecimiento del diálogo social, moderados por Kristina Krupavičienė.
Tomas Tomilinas, miembro del Seimas, expresó su alegría por la reciente huelga declarada en la empresa Bolt, que supone la primera huelga en Lituania en una llamada «empresa de plataforma digital», en la que los empleados trabajan sin conocerse físicamente y sin llegar a conocer siquiera a su empleador. En su opinión, se trata de un punto de inflexión histórico importante en el movimiento obrero y sindical lituano.
Según él, la coalición gobernante entiende la importancia del diálogo social y de los sindicatos, por lo que aplazó la aprobación del nuevo Código Laboral para que empresarios y sindicatos pudieran negociar para obtener mejores resultados en su articulado. Se han firmado los primeros convenios colectivos nacionales y sectoriales. Los residentes han tenido la oportunidad de destinar parte de su impuesto sobre la renta a los sindicatos, sin competir con otras organizaciones no gubernamentales o benéficas.
El Prof. Dr. Boguslavas Gruževskis, director del Instituto de Investigación del Mercado Laboral del Centro Lituano de Investigación Social, hizo una presentación en la que destacó los principales obstáculos para reforzar la capacidad de las organizaciones de trabajadores y especificó las formas de fortalecerlas.
El profesor Boguslav Gruževskis enumeró los problemas a los que se enfrentan los sindicatos, tales como: una pequeña red de sindicatos / organizaciones de trabajadores;
- un escaso número de convenios colectivos y la falta de negociación colectiva;
- insuficiente preparación de los trabajadores;
- falta de instituciones especializadas (centros de investigación, laboratorios de evaluación de las condiciones de trabajo, etc.);
- diálogo social insuficiente a nivel de la UE, nacional y local (sectorial, regional).
El profesor también presentó las etapas del desarrollo económico, mostrando a los participantes que la economía mundial está creciendo rápidamente, pero solo una pequeña parte de la población mundial puede disfrutar de los beneficios del crecimiento económico con una desigualdad que crece rápidamente.
Cristina Mihes, especialista jefe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) en materia de diálogo social y derecho laboral, realizó una presentación virtual, presentando los convenios de la OIT que garantizan la actividad sindical y el derecho a la negociación colectiva.
Barbara Surdykowska, corresponsal y abogada de Eurofound (Fundación Europea para la Mejora de las Condiciones de Vida y de Trabajo), habló de la experiencia de Polonia en la celebración de convenios colectivos y el desarrollo del diálogo social.
A continuación, se celebró un debate sobre el diálogo social a nivel sectorial y regional, moderado por Jovita Pretzsch, vicepresidenta de «Solidarumas».
Eglė Radišauskienė, viceministra de Seguridad Social y Trabajo, compartió sus ideas sobre las dificultades y las lecciones aprendidas en la conclusión de los convenios colectivos nacionales y sectoriales. Afirmó que este Gobierno ha fomentado el diálogo social en el sector público, aunque prácticamente no hay diálogo en las empresas privadas.
El debate sobre el primer convenio sectorial en el sector privado de Lituania, celebrado por el sindicato del transporte perteneciente al sindicato lituano Solidarumas y la asociación nacional de transportistas Linava, suscitó un gran interés entre los participantes.
Romas Austinskas, presidente de la Asociación Nacional de Transportistas Linava, señaló que actualmente la cooperación entre empresarios y sindicatos es cada vez más importante, ya que se está ultimando el tan esperado Paquete de Movilidad, destinado a mejorar las condiciones de trabajo y seguridad de los conductores para garantizar que todo el sector opere en igualdad de condiciones en toda la UE, promoviendo la equidad de la competencia, la eficiencia y la seguridad. Señaló que algunos países de la UE intentan frenar a los competidores de Lituania, utilizando el Paquete de Movilidad. Aseguró que la asociación Linava tiene la intención de prorrogar el convenio colectivo con el Sindicato de Transporte del Báltico «Solidarumas». Debido a la escasez de conductores en toda Europa, es importante que los empresarios aclaren las necesidades y expectativas de los trabajadores para evitar que los conductores opten por trabajar para la competencia.
Gintaras Čiužas, presidente del Sindicato de Transporte del Báltico «Solidarumas», compartió su experiencia adquirida al trabajar con conductores y empresarios. Destacó el papel de una comisión bilateral de empresarios y sindicatos formada en el marco del convenio colectivo. La función de esta comisión es ayudar a resolver rápidamente los conflictos entre empresarios y trabajadores sin recurrir a las comisiones de conflictos laborales.
Tadeusz Kucharsky, presidente del sindicato polaco Solidarnošč, habló de las dificultades que tienen los sindicatos para defender los derechos de los conductores a unas condiciones laborales y salariales dignas. Negó la credibilidad de una serie de afirmaciones de los empresarios del transporte destinadas a encubrir el intento de no mejorar las condiciones laborales y salariales de los trabajadores.
Durante las conversaciones se puso de manifiesto que las condiciones de trabajo de los camioneros lituanos son mejores que las de Polonia, porque en Lituania los empresarios están obligados a pagar a sus conductores una remuneración que supera en un 65 % el salario mínimo, mientras que en Polonia los conductores cobran el salario mínimo y la otra parte de sus ingresos consiste en dietas. En general, significa que las pensiones y las prestaciones sociales de los conductores lituanos son mayores que las de los polacos.
Por la tarde, tuvo lugar un debate sobre la movilidad de los trabajadores, moderado por Ričardas Garuolis, secretario general del sindicato lituano «Solidarumas».
Según él, las estadísticas muestran que durante los treinta años de independencia de Lituania, el país ha perdido 1,3 millones de personas por la disminución de la natalidad y por la emigración. Lituania ocupa un lugar destacado en el mundo en cuanto a disminución de la población y está a la altura de los países en los que hay guerras y hambrunas.
Slawomir Adamczyk, miembro del Comité de Negociación Colectiva de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), habló de las medidas adoptadas por los sindicatos de toda la UE para garantizar un salario justo y una vida digna a los trabajadores, así como para evitar el dumping social que socava la unidad de la UE.
Egils Baldzens, presidente de la Confederación de Sindicatos Libres de Letonia (LBAS), compartió su opinión sobre la experiencia de Letonia en la protección de los derechos de los trabajadores durante la pandemia.
El debate puso de manifiesto que las medidas adoptadas por el gobierno letón para paliar la crisis provocada por la pandemia fueron mucho más eficaces que las introducidas en Lituania.
Los participantes mostraron un gran interés por el convenio colectivo sectorial letón de la construcción, que establece un salario mínimo para los constructores muy superior al salario mínimo nacional a cambio de una reducción del pago de las horas extraordinarias de dos veces a una y media.
En Letonia, el número de empleados/trabajadores de terceros países, es decir, de estados no miembros de la UE, es mucho menor que en Lituania, por lo que el dumping social en Letonia no es todavía un problema tan grande para los trabajadores locales como en Lituania.
El siguiente punto del orden del día de la conferencia fue un debate sobre las nuevas formas de empleo y las garantías sociales para los trabajadores, moderado por Jelena Jurėnienė, miembro de la junta directiva de «Solidarumas».
Liutauras Vičkačka, asesor del ministro de Seguridad Social y Trabajo, realizó una presentación sobre las garantías sociales de los trabajadores y el Pilar Europeo de Derechos Sociales.
Daiva Kvedaraitė, miembro del Comité Económico y Social Europeo, habló sobre los estándares habituales de desempleo en los estados miembros de la UE. Señaló que Lituania se encuentra en un vergonzoso último lugar, a la cola de los estados miembros de la Unión Europea, en cuanto al número de convenios colectivos celebrados.
Inga Baltanosienė, directora del Servicio Público de Empleo de Lituania, hizo una presentación sobre «El teletrabajo como la mejor forma de trabajo en las condiciones de cuarentena de COVID-19», en la que habló de las ventajas y los desafíos del cambio al teletrabajo.
Ričardas Garuolis, presidente del Sindicato de Guías «Solidarumas», presentó los problemas de los trabajadores que trabajan individualmente bajo certificados de empresa y las posibles soluciones para superarlos.
El día siguiente comenzó con un debate sobre las formas de atraer nuevos miembros a los sindicatos, moderado por Rimtautas Ramanauskas, vicepresidente de «Solidarumas».
Edgars Marcinkus, presidente del sindicato «Liga de Trabajadores de Supermercados», explicó cómo consiguió reunir a través de Facebook a los trabajadores de los centros comerciales, que se encuentran entre los más vulnerables. Reveló que la cuenta de Facebook del sindicato tiene ya más de 10.000 seguidores, realiza encuestas periódicas a los trabajadores sobre las condiciones laborales y salariales y ofrece información sobre los beneficios del sindicato a los trabajadores.
Laszlo Laszloczki, representante de la Confederación Nacional de Trabajadores Húngaros MOSZ, compartió sus ideas sobre la experiencia de Hungría en el fortalecimiento de la representación de los trabajadores. Señaló que la innovación tecnológica está cambiando no solo la naturaleza del trabajo, sino también las actitudes de los trabajadores/empleados, en particular de los jóvenes, hacia el trabajo y los sindicatos. Por lo tanto, es necesario utilizar nuevas formas de implicar en las actividades sindicales a los trabajadores y empleados, especialmente a los jóvenes.
Kristina Krupavičienė, presidenta de «Solidarumas», expresó su opinión sobre el diálogo social en las condiciones del cierre de COVID-19. Explicó que bajo las condiciones de la pandemia, el Gobierno adoptó gracias a los sindicatos muchas enmiendas a las leyes que beneficiaron a los trabajadores al mitigar las consecuencias de la crisis causada por la pandemia para los trabajadores y al mismo tiempo para la economía en su conjunto.
Vitalius Jarmontovičius, abogado de «Solidarumas», presentó a los participantes en la conferencia las enmiendas al Código Laboral que entraron en vigor el 1 de agosto de este año y respondió a las preguntas planteadas por los participantes en la conferencia.
En la clausura de la conferencia, el polaco Tadeusz Kucharski realizó un llamamiento a los sindicalistas para que trabajen y luchen por hacer del mundo un lugar mejor para que vivan nuestros hijos.